17.12.19

El perfil "bueno" de un asesino mafioso


The Irishman

El perfil “bueno” de un asesino o mafioso

Otra de las películas que nos llega de Hollywood y que tiene toda la intención de alzarse con varias estatuillas es The Irishman.

Lastimosamente y de acuerdo con la ya típica actitud “yankee” mucho más pronunciada en estos momentos políticos, es casi explícitamente norteamericana, o sea el que no conoce la historia de los Estados Unidos de las décadas en las que se desarrolla se queda afuera. Muy ajustado también a la vieja doctrina Monroe “América para los americanos”.
Me pregunto por ejemplo cuántos estadounidenses sabrán dónde queda Paraguay.
O sea que pocos van a poder disfrutar la película en un ciento por ciento si nunca escucharon hablar de Jimmy Hoffa, Lansky, Costello, etc. u otras figuras emblemáticas de aquella época.
Lo que sí queda claro es que el tema de la mafia o “mob” como suelen apodarla los gringos es algo que les fascina… ¿porque será?

15.12.19

Remordimientos de conciencia

Remordimientos de conciencia

¿De dónde viene la conciencia?

“¿Quién derramó la chocolatada en el sofá?” Preguntó mamá visiblemente enojada. Lucas y Sofía se miraron sin decir una palabra. Lucas sabía perfectamente quién había sido: el. Pero por una de esas suertes la mirada inquisidora de la madre cayó sobre Sofía, y sin mediar palabra fue mandada a su cuarto, llorando a moco tendido, obviamente por qué se sentía injustamente acusada, y con razón. En ese momento Lucas creyó que el destino había jugado a su favor y aunque su madre le preguntó, acto seguido, si había sido él, se calló, lo negó con un gesto  y prefirió seguirle la corriente al azar que tan fácilmente había resuelto su problema.
Visiblemente aliviado y como si estuviera saboreando una victoria, deambuló un rato por la casa, jugó con su play-station, trató de ver la tele… pero había algo en su interior que no lo dejaba en paz.
Esa incómoda quietud tampoco cesó cuando estaban cenando, al contrario parecía haber crecido, y volvió con mucha más virulencia cuando se encontraba en su cama tratando de dormir.
Finalmente después de algunas horas, se levantó de su cama y aunque ya era tarde tocó la puerta del dormitorio de los padres y ni bien su madre abrió la puerta farfulló, casi sin que pueda entenderse, algunas palabras, tartamudeando por aquí y por allá hasta que por la expresión de la cara de su mamá sabía que su mensaje había sido entregado.
La bofetada no se hizo esperar pero tampoco le dolió demasiado porque significaba también que había sido absuelto, finalmente. Y pudo ir a dormir con tranquilidad con un una mejilla ardiente pero con la mente vacía y despejada.
La conciencia tiene su propia fuerza, sus propias leyes y no debería subestimarse.  

9.12.19

3.12.19

Honrar a papá y mamá ...o amar a papá y a mamá.


¿Honrarás a papa y a mama…
o amarás a papá y a mamá?

¿Qué sentido tiene obedecer o incluso honrar a los padres cuando
 nosotros vemos que no tiene sentido, y valga la redundancia?
¿Qué ocurriría?
 ¿Caería un rayo celestial fulminante que nos borre de la faz de la tierra?
¿O podríamos descubrir que detrás del conflicto, las diferencias, la distancia incluso
 la pelea, se abre un espacio virgen de la relación con los padres,
 inimaginable, madura y sumamente interesante?
Como de la calma reconfortante después de la tormenta…

Kelsey Vere

Habrá ocurrido hace quizás 35 años. Eran las 04:00 de la mañana, un invierno oscuro. Soplaba un viento frío, casi polar por las calles de mi ciudad universitaria de Bonn, Alemania.
Venía de una fiesta latina…( porque las alemanas terminaban a las 12:00) y pensé que no iba a haber un alma en esas circunstancias, cuando sorpresivamente vi parado a un hombre ya mayor ante un semáforo, esperando que se active la luz verde para cruzar.
“Typisch deutsch “(típico alemán) pensé para mis adentros, pero mi parte latina sin pensarlo dos veces y como llevaba algunas copas de más, cruzó trotando alegremente, cántico de por medio la amplia avenida… y en todo mi ser sentí por un instante un gozo inexplicable sabiendo que estaba rompiendo las reglas sin asco.
Pero un vozarrón, como de ultratumba, que después me percaté que era de ese señor me arrancó de mi trance alborozado como si me hubieran dado una bofetada.  
¡El semáforo está en rojo y no se cruza!
Del susto me tambaleé unos instantes hasta que mi mente racional pudo volver a tomar el control de la situación, para seguir camino no sin antes levantar mi mano derecha y saludarle a ese sujeto con un “Heil Hitler” a ese pobre diablo que no conocía otra cosa que obedecer a como dé lugar aunque sea estúpido.
Y pensé “esos son los que hicieron posible la subida al poder de tan ominoso personaje”.

14.11.19

El "Joker" o la debacle del modelo americano


El mensaje del Joker

Saliendo al paso de todos aquellos que tildaron la película “Joker” de Todd Phillips como instigación a la violencia, déjenme decirles que, en primer lugar cualquier obra artística, ya sea un dibujo, escultura, obra de teatro, si, incluso una fotografía, por muy parecida que sea a la realidad es sencillamente una alegoría, o para los que no conocen el término, una representación de la realidad a través de la brocha, manos, u ojos en este caso, del artista.

Y en segundo lugar, nadie se rasgaba las vestiduras con las películas de Sam Peckinpa, quien acuñó ahí por los años 70, 80 aquello – que ciertamente hasta hoy me parece abominable – de que la violencia puede ser arte.

Quizás, en ese contexto, sería más lógico preguntar…”¿de dónde viene esa violencia? ¿Si nuestros padres ya la veían sin tapujos, porque hoy hay gente que aun se queja del “Joker”?

Y finalmente, quizás todo ello forme parte del mensaje contundente y lapidario que el “Joker” nos quiere transmitir.  Esto es simplemente el resultado de algo que se fue gestando a lo largo de las últimas décadas.  Obviamente va dirigido en primer lugar a la sociedad americana, pero también a nosotros, quienes deberíamos reflexionar hasta qué punto es conveniente emularla.

29.10.19

Que tienen en común un bufón, un payaso y un psicoterapeuta


Que tienen en común un bufón, un payaso y un psicoterapeuta
 

Comencemos por la escena del bufón en la obra de Shakespeare del rey Lear Ahh… pero si es un clásico me dirán muchos jóvenes de hoy con esa mirada de desdén tan típica… por supuesto y con justa razón, les respondo…y añado ¿ya has visto la obra? ¿No? Y entonces cómo puedes entender al “Joker” de Todd Phillips del que están hablando por todas las redes.

Y es que todo está conectado. Pretender ser una estrella en el firmamento, sin pasado, es una ilusión adolescente. Y eso se aplica incluso al “Joker” que tanto revuelo está causando.

8.9.19

Ver o no ver…la diferencia entre la vida y la muerte


Ver o no ver…la diferencia entre la vida y la muerte


Padre nuestro que estás en  los cielos,
En el caso de un secuestro una de las opciones que la víctima tiene de sobrevivir es intentar crear un vínculo con los secuestradores. Cuanto más fuerte el vínculo con un ser humano mayor es la aprehensión para herir o matarlo. Por eso muchos secuestradores profesionales evitan el contacto prolongado con la víctima y el cabecilla suele cambiar a los cuidadores regularmente y sobre todo presta mucha atención si ha habido algún tipo de contacto. Porque en el momento en que el perpetrador llega a “ver” a su víctima, o sea que la ve como un ser humano como él o como ella deja de ser un negocio lo que puede entorpecer o incluso sabotear el éxito del emprendimiento.
Se pueden evitar guerras enteras con el simple hecho de “ver” al enemigo. Es por eso que muchas veces los instigadores de guerras utilizan métodos de propaganda muy sofisticados con el único fin de ampliar las distancias entre las partes combatientes e impedir un acercamiento, tal y como lo demostró en su momento la maquinaria propagandista de Goebbels, por ejemplo, durante la Segunda Guerra Mundial.
Por otro lado, cuando finalmente podemos “ver” a un enemigo al que hemos combatido por años, ocurren verdaderos milagros.

7.9.19

Como prepararse para un amor que permanece


Cómo prepararse para una pareja y un amor que permanecen.

Parte 1

¡Esta pasado de moda casarse! Es cada vez más difícil encontrar parejas jóvenes que estén dispuestas a compartir sueños, cama y macarrones, como versa la canción de Serrat del Curro “El Palmo”.
Aquellos y sobre todo aquellas que aún lo hacen y sobre todo en sociedades conservadoras y tradicionales como la nuestra, cumplen más con un rito católico familiar que otra cosa. Viene a ser en realidad una manera de emanciparse de las ataduras de la familia de origen y el inicio de una autonomía condicionada. Pero puestos a escoger es mejor eso que seguir cumpliendo las reglas de papa y mama, sobre todo cuando el mundo ya no es como ellos lo conciben.
Todo eso no tiene nada de bueno ni de malo. Son simplemente tendencias que se van trazando, querámoslo o no. Lo que debería importarnos como padres y como profesionales de la salud mental – nunca mejor dicho – es la felicidad de nuestros jóvenes y admitir que nuestro ideal de felicidad nada tiene que ver con el de ellos ni con el de esta época, la suya.
La solución más fácil es declarar obsoleta la unión marital y disfrutar de la juventud hasta que reviente el cuerpo. Como lo dice  Wilfried Nelles en su libro “Hombres, mujeres amor y sexo”   y usando mis palabras: hoy en día es más fácil que se viralice un video de un octogenario que gana la maratón de Nueva York, que la imagen apacible de una persona mayor que contempla satisfecho el atardecer de su vida.
Lo difícil es, como siempre transitar el camino de lo que a simple y prima vista se muestra como algo más bien poco atractivo, hasta aburrido por no decir “del viejazo” e incluso hasta cierto punto insoportable.
El o la que después de 20 o 30 años de convivencia con la misma persona aún insiste en que sigue “enamorado/a” de su pareja simplemente miente. Porque aunque se obstine en ello, no siente lo mismo, porque si lo hiciera sería falso. ¿Por qué? Por la sencilla razón de que también en el amor de la pareja hay una evolución y lo que unió a una pareja al principio, ese encuentro electrizante, fascinante y maravilloso, o sea el enamoramiento, debería haber dado paso a otra cosa.

Claro que en nuestra época, la del endiosamiento de todo lo joven, con toda seguridad también puede viralizarse  “milagrosamente” que un "enamoramiento" haya resistido a los embates despiadados del tiempo, y es que es más importante mantener la ilusión juvenil que aceptar la verdad adulta.

Fin de la parte 1

1.5.19

Plantar un árbol, escribir un libro, educar a un hijo


Plantar un árbol,
Escribir un libro
Educar a un hijo


y…ser maestro o mentor

Einstein fue un científico brillante, pero un maestro mediocre, Picasso nunca se preocupó por legar su pericia, sus destrezas a alguien, al contrario, su ego era tan impávidamente grande que concebir que pudiera tener un sucesor era algo inimaginable para él y más bien abominable…
Beethoven si bien estricto y exigente, era temido y su grandeza se desvanecía por completo en sus ataques de ira y cólera, que a su vez reflejaban las consecuencias de una infancia tullida. Quizás si se hubiera empeñado en ser un buen maestro hubieran sanado sus heridas.
La grandeza de alguien no lo convierte en un buen maestro o mentor. Es más bien lo contrario.  El camino del maestro o mentor terminan por alisar el diamante en bruto, que es, le proporcionan una nueva cara, un nuevo lado.  

Es más fácil decirlo que hacerlo. Y no basta con ser “nombrado” profesor pararse frente a la clase y hablar.
Uno de los casos más difíciles que he tenido es, enseñarle a una pareja de jubilados el idioma alemán, por ejemplo. Y no porque fueran más lentos, menos inteligentes (ambos eran profesores eméritos de una universidad de renombre), sino porque era yo quien debía renunciar a hacerlo “a mi manera”.

Cuando uno toma en serio el desafío, al estudiante o a mentoree (mentorado) se convierte en tu examen un tu prueba, en tu obra. Es él o ella quien te indica por dónde ir, los caminos y las opciones. Conseguir que te entienda, que te haga caso, depende también de cómo y de qué manera.
Obviamente tiene sus limitaciones. Tampoco se trata de hacer más del 50 % y apadrinar o “amamantar” ( que es lo que muchos maestros hacen para en realidad evitar o circunvalar el” verdadero esfuerzo” – y si bien obtienen resultados positivos, no son los de sus discípulos, o estudiantes, sino los suyos.)

Se trata de transitar la senda difícil del dar para ver. Cuando escucho aquello de que los maestros dan y muchas veces no ven el fruto de lo que han dado digo “¡eso está mal!” porque al igual que un carpintero hace entrega de un mueble con resultado garantizado o un ingeniero inaugura un puente precautelando que no se derrumbe, el maestro debe haber verificado el fruto de su trabajo y hacer entrega del estudiante, de manera impecable. Recién entonces termina su trabajo realmente.

Lógicamente, y repito eso se da solamente si también el estudiante cumple con su parte. Como suelo decirle a muchos de mis estudiantes particulares antes de iniciar las clases “Todo depende de ti, a un estudiante que no tiene ganas de aprender tampoco lo hace estudiar un profesor de Harvard o Cambridge, etc.

Termino este artículo acordándome de mis grandes maestros en silencio pero con mucha devoción. No voy a nombrarlos uno por uno…al menos no en este blog, pero algunos de ellos pasaron por mi vida tan solo en una tarde, en un momento, en un destello, simplemente para enseñarme algo,¿ o era la vida que lo hizo a través de ellos?

2.4.19

Diálogo entre un perro y un.lobo

Diálogo entre un perro y un lobo

Lobo:  Perro, no eres más que un patético descendiente de nuestra estirpe. Renunciaste a tu parte salvaje para someterte al ser humano como un esclavo.
Perro:  Así es y no lo voy a negar. Pero a diferencia de ustedes, los lobos, nosotros los perros no tenemos que temerle al ser humano. Al contrario, como mascotas hemos prosperado.
Lobo:  Bueeeee ….ciertamente... ¿Pero a qué precio? Renunciaron a la libertad, a los bosques, a los prados verdes, a compartir la vida con sus iguales, a cazar juntos, a disfrutar de las salidas y puestas de sol con la tranquilidad de saber que eres libre.
Perro:  En realidad, si lo miras bien, una puesta de sol con tu amo puede ser tan maravillosa como con los de tu misma especie.
Lobo:  Si, claro…..jajaja…. tan bien como el esclavo encadenado puede disfrutar de esa puesta de sol…

Perro:  Si, ciertamente, Pero por lo menos la puede disfrutar, mientras que para muchos de ustedes es la última. Lo de ustedes es un romanticismo aventurero trasnochado….nosotros al menos estamos asegurando la supervivencia de nuestra especie.
Lobo:  ¡Antes morir de pie que vivir arrodillado! Prefiero morir como lobo libre que como perro enjaulado…
Perro:  En realidad nunca estuvimos enjaulados. Es más, nuestra naturaleza dócil y a la vez salvaje es una ventaja evolutiva decisiva…
Lobo:  Pero dependen del hombre para casi todo.
Perro:  Cuando arrecia el invierno y ustedes los lobos comienzan a pasar hambre e incluso llegan a devorarse unos a otros, no nos falta el plato de comida en el calor del hogar junto a una chimenea…
Lobo:  ¡Tú servilismo me da asco! Renunciaste a tu esencia animal, modificaste lo que te define, vendiste tu alma para sobrevivir como un apéndice de la raza humana, un aditamento, un parásito…
Perro:  No creo que la palabra parásito sea la adecuada. Estamos dispuestos a entregar nuestra vida por nuestros amos. Sentimos, percibimos su tristeza, los acompañamos en los momentos difíciles. Ciertamente hemos renunciado a nuestro salvajismo, pero a cambio hemos sido ofrendados con algo que ustedes jamás comprenderán.
Lobo:  ¿Que sería eso?
Perro:   AMOR. Claro que para nosotros es limitado, pero a pesar de todo no deja de ser maravilloso. El saber que tu amo te quiere es algo inexplicable.

Lobo:   Jajajaja. ¡Es increíble com tuerces la verdad! Amor… Jajajaja… es un invento más de los muchos inventos perversos del hombre para someter a todas y cada una de las criaturas a su alrededor….

Perro:  Vamos lobo, si pudieras harías exactamente lo mismo. Lo que pasa es que no puedes hacerlo y te rehúsas a aceptar justamente eso. En ese sentido, mi querido hermano, somos incluso más inteligente que todos ustedes, ya que supimos reconocer hace ya mucho tiempo la superioridad del ser humano y también su naturaleza opresora que en realidad es lo que define a cada una de las criaturas de este planeta. Hace tiempo entendimos que la libertad así como ustedes la quieren ejercer no existe, o mejor dicho tiene fecha de vencimiento. La vida salvaje nunca va a poder prosperar mientras una especie sea superior a todas las demás. En el momento en que caiga el último de ustedes habremos asegurado nuestro lugar como los segundos al mando de la cadena alimenticia. Quizás no tengamos la libertad con la que sueñan ustedes, pero en realidad no ha existido nunca. Es algo que incluso muchos seres humanos, sobre todo los jóvenes, no terminan de entender Somos libres en la medida de nuestras opciones y limitaciones, pero es mucho, mucho más de lo que ustedes alguna vez puedan soñar. 

1.4.19

¡Abajo el patriarcado! ¿Viva el matriarcado?


¡Abajo el patriarcado! ¿Viva el matriarcado?

¿Es todo culpa del patriarcado?
Es fácil echar la vista atrás, apuntar con el dedo señalador a los escombros de siglos de guerra y muerte y decir “¡ustedes los varones son los culpables!” La visión del patriarcado es responsable, la única culpable, etc.

La pregunta que queda en la nebulosa es: ¿Ustedes las mujeres – el matriarcado – lo hubieran hecho mejor?

¿Son guerras, conflictos y muerte, culpa del varón o es más bien un rasgo inherente del ser humano como especie?
¿Las mujeres no pelean?

Aun así debemos asumir los “errores del patriarcado” que hoy por hoy han quedado bastante patentes. Aunque yo no los llamaría “errores” sino más bien parte de una evolución de la consciencia, o simplemente parte de nuestra historia.

También admito que muchos de esos “errores” fueron puestos sobre el tapete por mujeres o la visión feminista surgida en el siglo XX.

En ese sentido creo no ser el único en admitir que es imperativo encontrar otras maneras de allanar diferencias entre nosotros, los seres humanos.

¿El feminismo beligerante aún puede aportar cambios?
Sin embargo, aún hay feministas que persisten en “demonizar” la palabra “patriarcado” y responsabilizar al hombre (como género) de todos esos males que se han cometido y siguen cometiendo.

No cabe la menor duda que el feminismo beligerante ha aportado su granito de arena para cambiar una sociedad que discriminaba a la mujer y en muchas partes aun lo hace.

Sin embargo el precio que se paga debilitando al patriarcado es sumamente alto, sobre todo para los jóvenes varones. Las mujeres no pueden proveer modelos masculinos – porque simplemente son mujeres y los hombres tienen hoy por hoy y a raíz de la campaña de descrédito de la palabra “patriarcal” tienen miedo de ser demasiado “patriarcales”…

¿Existe una palabra que pueda describir lo que caracteriza al hombre y eliminar las diferencias entre hombres y mujeres? Y sobre todo ¿Es conveniente?
¿Si no es patriarcal o matriarcal… que sería?

Aprender de los errores
Es la mujer la que hoy por hoy debería rescatar las bondades del patriarcado. Reconstruir aquello que en su lucha y afán igualitario ha destruido y aceptar que el hombre seguirá siendo hombre y que eso no solamente es positivo sino que además le beneficia enormemente, si está dispuesta a encontrar esos beneficios.
Por su lado creo poder decir, con mucha seguridad, que nosotros los hombres hemos entendido el “mensaje” somos mucho más conscientes que nuestros abuelos, pero queremos seguir manteniendo nuestra dignidad y sobre todo nuestra identidad, aquello que incluso como parte del patriarcado nos define. Quizás ese sea el camino hacia una convivencia entre hombres y mujeres a pesar de las diferencias.

18.3.19

Soy bueno en lo que se hacer

Soy bueno en lo que sé hacer

De buenas a primeras el título que acabas de leer sugiere algo obvio. Pero tan obvio que resulta interesante, y si   he logrado llevarte hasta aquí significa que mi propósito ha cumplido su objetivo. Y es que eso es una de las cosas en las que soy bueno. Abordar un tema de tal manera que la otra persona. O sea tu, en este caso, comience a reflexionar inmediatamente, a ingresar a un espacio de tiempo desconectado del mundo, del ruido de las calles, de su entorno… (no te distraigas pensando en el)…

A partir de este momento podría hablarte de la piedra que va cayendo a un estanque y como una hoja que flota en el viento se desliza hacia el fondo oscuro y abominable. Sin embargo lo observas como un niño sentado frente a un acuario fascinado por el efecto de la gravedad del agua, por el silencio y la tranquilidad que emanan de ahí y por la calma que te invade como una masa incontenible pero sumamente agradable que primero rodea tus piernas y como si tu cuerpo fuera un vaso de agua lentamente te va llenando, va penetrando y colmándote de una paz y una calma aliviadora y absolutamente confiable.
Y recién entonces cuando te hayas colmado de esa tranquilidad sientes una firmeza y una solidez profunda, un peso que te mantiene con los pies en la tierra como si cada célula de tu cuerpo decidiera que quiere quedarse escuchar y pensar en lo que a continuación tengo que decir.


… esto es PNL


23.2.19

Diario de una adopción


Diario de una adopción

Antes…

Nos casamos tarde. Yo ya tenía una hija de un matrimonio anterior, pero mi esposa siempre soñó con una gran familia, y a decir verdad también a mí me gustaba la idea, aunque nunca pensaba realmente en serio sobre la posibilidad llevarlo a cabo.
Cuando ella me preguntó si no quería tener más hijos no me opuse y lo tratamos durante un buen tiempo, y aunque uno se prepara para las consultas médicas, los cuidados y coordinaciones pertinentes, etc. lo más difícil es lidiar con la frustración y decepciones ante la ausencia de resultados.
Verla sufrir así era mi peor pesadilla. Yo me daba cuenta que era algo que le nacía de las entrañas y que le faltaba, así que en el momento en que la palabra adopción comenzó a circular en nuestras conversaciones no quise oponerme. Si bien tenía mis serias dudas, (También puede leer : https://lapaginaderudolfbehrens.blogspot.com/2019/01/adopcion-una-alternativa-al-aborto.html ) a raíz de experiencias de otras parejas. Una de las cosas que más me preocupaba era el hecho de que existe un riesgo real de que los padres biológicos, si bien entregan a sus hijos en adopción, más adelante pueden utilizar el cariño que uno desarrolla con los niños con fines perversos como chantaje, extorsión, etc.  sobre todo teniendo en cuenta una realidad inalterable: ellos son los padres biológicos de los hijos. Y aunque la legislación ampare a los padres adoptivos, muchas veces el conflicto que se siembra en los niños adoptivos afectados crea una inestabilidad muy grande en la familia.

Al principio mi señora probablemente lo haya entendido como falta de entusiasmo y convicción de mi parte, y fue el desencadenante de más de una discusión al respecto pero en el momento en que se dieron las condiciones adecuadas y ante las evidencias incuestionables no opuse más resistencia.
De hecho ella era la que llevaba adelante todo lo relacionado con la búsqueda y un buen día me habló de una nena de tres años y su hermanito de madre, de siete que necesitaban un hogar urgentemente.
En el instante en que los vi, tengo que confesar que una simple mirada de mi señora bastó para finalmente cortar las amarras y embarcarnos en lo que sería una de las aventuras más hermosas de nuestra vida.
Hoy ya han pasado dos años y aunque no fue fácil y sigue siendo un reto. Una de las cosas que he aprendido es que uno se hace, crece y se fortalece en la adversidad y muchas veces dudamos de lo que realmente somos capaces, de los recursos y de la fuerza que tenemos hasta que nos encontramos frente a frente con el desafío que la vida en su ilimitada sabiduría nos ha puesto en el camino sabiendo perfectamente que estamos a la altura del mismo.
Y así fue como un buen día, después de visitarlos dos o tres veces y de negociar la posibilidad de que finalmente puedan venir a casa y quedarse con nosotros mientras las gestiones legales iban tomando su curso, nuestra familia se agrandó.
Aún recuerdo que la pequeña tenía miedo de subirse a nuestro auto y tuvimos que sacar al conejo de la vieja chistera, a su hermanito a la ardilla y algún que otro truco de magia más para finalmente introducirla al vehículo sin que ella se dé cuenta de donde estaba y mucho menos a donde se iba. Tanto la pequeña como el mayor ya habían vivido tres vidas. Rechazos, frustraciones que no cualquier niño es capaz de soportar, además de dolor, abandono, desamparo y todos los sustantivos y adjetivos que nos podamos imaginar para describir la desidia de un sistema que echa los niños a la calle si son rechazados por sus padres. Casi diría como en la edad media, en que cuando la madre y el padre morían los niños terminaban como esclavos, las niñas como prostitutas o en el peor de los casos y más comúnmente muertos en alguna cuneta de la carretera.


12.2.19

Porque acudir a un psicoterapeuta

Porque acudir a un psicoterapeuta

(Cuál es la función esencial de un psicoterapeuta)


https://scratchbook.ch/2011/11/
Creo poder decir con cierta seriedad que hoy en día eso de que acudimos a un psicoterapeuta o psicólogo porque tenemos alucinaciones, estamos depresivos o somos adictos al juego ya no es tan actual. ¿O si?

Lo que ahora “se ha puesto de moda” son cuadros de estrés laboral, fatiga o el famoso síndrome de Burnout para acudir a un profesional.
Lastimosamente muchos psicólogos enfocan estos problemas de salud químicamente, prescribiendo tranquilizantes y medicación psicofarmacológica sin darle mucha importancia al hecho que esto pueda desembocar en una adicción, que es mucho más difícil de tratar. Es cuando la solución se convierte en problema.

El que no obstante busca un cambio fundamental en su vida y está libre de prejuicios hallará en un buen profesional las respuestas a muchas preguntas que está buscando.


Ahora bien incluso ante ese escenario, si el psicoterapeuta no da la talla volvemos al punto de partida.
Si lo deseas puedes también leer : Como saber si un psicoterapeuta es bueno .

Pero más allá de la calidad de un profesional una pregunta interesante que aún queda en el aire es: “¿Cuál es en realidad la función de un buen psicoterapeuta?”

Para ilustrarlo mejor me remito a una conversación entre un esposo y su esposa después de una sesión exitosa del esposo con su psicoterapeuta.

-        El: …y entonces me dijo que en realidad soy muy retraído.
-        Ella: pero mi cielo si eso te lo llevo diciendo toda la vida amor…(con cara compungida)
-        El: si, cierto amor, pero esta vez lo entendí.

25.1.19

Adopción vs. Aborto - Capítulo II


La adopción
Capítulo II


Adopción vs. Aborto

A pesar de que el aborto esté legalizado en la mayoría de los países europeos, no deja de ser un tema muy controvertido, incluso en aquellos lugares en Europa en donde presuntamente se perciba mayor grado de ilustración en una población (en el sentido histórico de la palabra) aparentemente desligada de la moral religiosa y menos sometida a sus cánones moralistas.
Y es que, a la hora de la verdad la que decide eliminar, o no, aquello que algunos llaman ser vivo y otros “algo” en proceso de gestación, es la mujer embarazada. Es ella la que va a tener que lidiar con esa duda.
Racionalmente siempre habrá argumentos, como por ejemplo: “No era el momento de traer un niño a mi vida”, “Iba a vivir en condiciones muy precarias”, “No estaba preparada para ser madre” etc. – obviando por supuesto casos de violación – sobre todo de menores – aunque, con matices, me atrevo a afirmar que incluso entonces es una alternativa viable.

5.1.19

Adopción - una alternativa al aborto, humana y responsable


ADOPCIÓN - UNA ALTERNATIVA AL ABORTO, HUMANA Y RESPONSABLE 

Capitulo I

Consideraciones iniciales

La adopción casi siempre es el último recurso.
Cuando mi esposa y yo decidimos adoptar niños ya habíamos pasado por el viacrucis por el que pasan muchas parejas con problemas para tener hijos biológicamente: años de intentos infructuosos, meses de tratamientos, esperanzas, angustia y hasta diría un cierto grado de desesperación, al ver que todo esfuerzo es estéril.
mi nueva familia
Quizás ese haya sido el momento en el que por primera vez en mi vida empecé a pensar que si bien los niños vienen a través nuestro, no son obra de nuestra voluntad o falta de ella sino que hay algo más detrás de todo ello. Algunos lo llaman Dios, otros lo llaman el destino, designio, etc. pero lo que sí pude constatar a ciencia cierta es que no tenemos control sobre ello.